Al ser la primera vez que me dirijo ante ustedes quisiera que me conocieran un poco y lo que me llevó a ser Tutor. Les voy a ser sincero, la educación siempre me había llamado la atención y desde que estuve en secundaria quise ser educador de enseñanza superior, porque al ver a mi alrededor los problemas académicos y muchas veces personales de mis compañeros de bachillerato, aunados a los míos, nunca pensé en dar clases a adolescentes y niños. Por así decirlo, las situaciones de la vida me coaccionaron y me trajeron aquí ¡Gracias vida!
Y le agradezco el ser Tutor porque a temprana edad me enseñó a ser independiente, a ser puntual, a ser responsable, a manejar una comunicación muy variada entre padres, niños y adolescentes de diferentes estratos socio-económicos y familiares, por no mencionar que tuve que aprender cada rincón y calle de gran parte de la ciudad y sus afueras (OK, es mi culpa por aceptar ir a más de 50 ubicaciones de la plataforma y nunca decir no a un nuevo cliente), desde Costa del Este hasta Brisas, volviendo a Monte Oscuro y Ancón, sin contar las veces que me perdí, tuve desperfectos mecánicos o llegue tarde a una tutoría por lluvia, tranque o accidentes en la vía.
Perdón, perdí el hilo. Como les decía la vida me coaccionó. Al ingresar a mi universidad tuve distintos problemas para hacer frente al gasto por la ausencia de apoyo paterno por lo que, debiendo cientos de dolares a mi casa de estudios y con la esperanza perdida, mientras caminaba un día carcomiendome la cabeza sobre qué podía hacer para no perder mi futuro, vi enfrente mío las soluciones a mis problemas, un cartel que anunciaba la necesidad de tutores, de cualquier materia, de cualquier edad, siempre y cuando tuviera las ganas de enseñar; y así comenzó mi camino en esta plataforma.
Aunque actualmente por trabajo no puedo dedicarle tanto tiempo como me gustaría a la enseñanza, Tutorez fue mi práctica para la vida laboral y adulta, donde pude practicar, no olvidarme, e inclusive aprender de las 17 materias que enseño. Y digo aprender, porque aunque no lo crean un Tutor de Español o de Francés no siempre sabrá todo acerca de esa lengua, y si lo sabe necesita refrescarlo antes de dar la tutoría. Acerca de esto último les estaré hablando en una próxima ocasión.
¡Hasta la próxima!